Mirilla digital electronica
¿Quien no tiene una mirilla en la puerta de su casa?
Esa es la primera razón que confirma la utilidad de este pequeño aparato que básicamente es una lente de gran angular para que cuando observemos desde la entrada, tengamos una visión amplia del rellano de la escalera.
Una mirilla barata por llamarla de alguna manera, jamás cumplirá su función esencial, ya que el ángulo de visión es muy cerrado y si es de baja calidad; sus cristales no tendrán la nitidez necesaria para identificar a la persona que llama a nuestra puerta, pues raramente esta se situará justo enfrente y a un metro de distancia, por lo que una mirilla optima, deberá de contar con un ángulo de visión mínimo de 130 grados.
La principal misión de las mirillas es poder ver desde el interior hacia el exterior de la vivienda, por este motivo, es necesario que esté colocada a la altura de los ojos, no se pueda desmontar desde fuera, y cumpla un ángulo de visión que abarque toda la entrada. Solo así cumplirá la función que necesitamos.
Mirillas de última generación
La tecnología, ha hecho posible que la industria haya desarrollado lo último en seguridad contra intrusos; se trata de una mirilla digital, que cumple con las funciones de una mirilla tradicional, proporcionándonos además una seguridad añadida gracias a los avances de la ciencia.
La mirilla electrónica para las puertas de entrada es un nuevo concepto que proporciona más seguridad en los domicilios, porque cumple exactamente la misma función que la mirilla tradicional, pero con la ventaja de no tener que pegar el ojo a la puerta, ya que podemos ver cómodamente a la persona que está llamando, en una pantalla de color, exactamente como si fuera un mini televisor.
De esta manera, las personas mayores, no tendrán que esforzar la vista, los niños no tendrán que subirse a una silla para ver quien llama, y las personas impedidas incluso los discapacitados o personas que vayan en silla de ruedas podrán observar de manera clara a la persona que hay tras la puerta de la casa.
El funcionamiento no es complicado ni engorroso, ya que cuando toquen al timbre, basta pulsar un botón para que las imágenes del exterior, se muestren en la pantalla, pero con un añadido más; la propia mirilla hace una foto a la persona que llama, que queda grabada en una simple tarjeta de memoria.
Esta función de fotos no está de más, ya la mirilla grabará a todo aquel que llegue a la puerta de su casa, y en su ausencia realizará una foto silenciosa que le permitirá saber quien estuvo en su casa y a qué hora llamó al timbre.
Todas las imágenes quedarán grabadas en la memoria hasta que Vd. decida borrarla o entregarla a la policía en caso de que algún intruso intentara forzar la puerta de su casa.
Y lo mejor de todo es que se coloca como una mirilla normal, fijándose por dentro, y que su precio, lejos de ser desorbitado, está al alcance de todos los bolsillos.
En definitiva estamos ante el producto del año digno de merecer este título por su función, por la protección que ofrece y que además cuenta con la ventaja de tener un funcionamiento sencillo y un precio asequible que sin duda convencerá a quien se interese por ella.
Viejecitos 